Jeeves y Wooster en otra historia de P.G. Wodehouse
Hace tiempo que me hice fan de Jeeves y de Bertie Wooster (a través de la serie de la BBC interpretada por Hugh Laurie, en el papel del atolondrado y encantador juerguista, y Stephen Fry, impagable mayordomo y cerebro gris de todas las aventuras). Como he terminado el curso, y a la vez que leo un estudio sobre el drama renacentista inglés, a ciertas horas me entrego al relajo y a la risa que me provocan las historias de P.G. Wodehouse.
De acuerdo, Jeeves comienza con uno de esos tour de force que a menudo se establecen entre el mayordomo y el joven inglés, cuando Jeeves, horrorizado por la compra de una chaqueta blanca con botones dorados, hace ver a su amo la inconveniencia de lucir tan horripilante prenda en Inglaterra. Bertie, quien apela a los sentimientos de orgullo y de pundonor de los Wooster, no cede. Se lleva la chaqueta a Brinkley, desafiando a su mayordomo. La guerra comienza. No sólo eso: Bertie se siente ofendido porque todos confían más en Jeeves que en él, a la hora de arreglar los desaguisados amorosos de toda esa tropa de jóvenes estrafalarios que constituyen el centro de la sátira en las novelas de Wodehouse.
Así, pues, Bertie toma las riendas del desaguisado, primero aconsejando a Gussie Fink-Nottle, el amante de las salamandras, y después a Tuppy Glossop, al mismo tiempo que asesora su tía Dahlia con la mejor estrategia para hacerse con quinientas libras para salvar su revista femenina. Previsiblemente, ocurre un gran desastre y nada puede hacer Bertie para arreglar el gran lío que ha montado, por lo que Jeeves debe intervenir.
Los diálogos son brillantes y las descripciones espléndidas. Entramos de lleno en el mundo de la sátira inglesa. Wodehouse es heredero de Shandy, Thackeray, Austen... El mundo de Jeeves y Bertie Woster es surrealista, delirante, simpático y absurdo y la lectura de cualquiera de sus historias es absolutamente recomendable para pasar ratos inmejorables.
(Ah, y si es posible, no dejéis pasar la serie, una de las mejores de aquellos tiempos míticos de la BBC).
P.G. Wodehouse, De acuerdo, Jeeves, Anagrama, Barcelona, 1990.
4 comentarios
Gabriela -
De todos modos, está disponible en la alegre mulita, aunque sin subtítulos. Mi hija mayor me habló de una web donde se pueden buscar subtítulos y acoplarlos a las series, pero eso ya escapa a mis habilidades.
Un abrazo.
Ferre -
Oye, Gabriela, la serie de la BBC no esta editada en DVD en España, ¿no? Yo también la recuerdo como una de las mejores de la época (los ingleses produjeron varias docenas de maravillas televisivas durante 25 años).
Saludos,
Ferre
Gabriela -
Licantropunk -