¿Quién no ama a Johhny Depp?
No puedo imaginar un actor más amable que Johnny Depp. Desde sus comienzos como Eduardo Manostijeras hasta hoy, me parece un actor coherente. Su apariencia no es extraordinaria y no la necesita: le basta con su mirada, tan expresiva, y con su voz y movimentos, tan adecuados siempre a lo que podemos llamar el hombre romántico. Porque Depp encarna a ese hombre: contestatario, extraño, original, anticonvencional: es el pirata (Piratas del Caribe), el robot no terminado (Manostijeras) , el hombre justo enfrentado al más allá (Sleepy Hallow), el gitano errante ( The man who cried) , el poeta cínico y autodestructivo (El Libertino), el cineasta pobretón y fracasado (Ed Wood), el desperado que por salvar a su familia es capaz de todo (The Brave).
Aunque el concepto de hombre romántico da vida a todas estas actuaciones, no vamos a confundirlo con un héroe romántico. Una de las características de Depp es que humaniza a sus personajes. Ninguno está por encima de la realidad, ni siquiera los más fantasiosos. Todos tienen una humanidad que podemos ver y tocar y sentir.
Y todos son amables.
7 comentarios
Darthz -
Ático -
Gabriela -
ernesto -
Rafael Rubio -
Enhorabuena por el blog.
Ifer Lacroix -
isabelbarcelo -